Composición:1) Rp (Fotoprotector): Juvefoxo 2%; Dióxido de Titanio 15%; Crema Fluida c.s.p. 100 g. 2) Rp (Post Solar): Hidrovitón 5%; Juvefoxo 2%; Extracto de Té Verde 4%; Vitamina A 1%; Crema Base oil free c.s.p. 30 g. 3) Rp (Antiage): Juvefoxo 2%; Coenzima Q10 5%; Argireline 5%; Leuphasyl 3% Crema base no iónica c.s.p. 30 g. 4) Rp (Antiage - Vitalizante): Juvefoxo 2%; Ácido L- Ascórbico 5%; Pronalén 2%; Alistín 0.5% Crema base Oil Free c.s.p. 30 g.
Descripción:Antecedentes: Mantener el código genético libre de mutaciones es una tarea ardua, ya que, contrario a ser inerte, el ADN es una entidad química sujeta a agresiones y errores inducidos por diversos factores. Aparte de la inestabilidad bioquímica intrínseca del ADN, sus cadenas sufren la influencia constante de agentes genotóxicos, endógenos y exógenos (estrés oxidativo, condiciones ambientales entre otros) y errores durante su replicación. Aunque estas mutaciones implican beneficios evolutivos, algunas ocasionan alteraciones perjudiciales cuyos efectos se evidencian a nivel macroscópico (por ejemplo: piel). La respuesta a este daño genético conlleva la inducción y estimulación de diversos mecanismos de reparación del ADN, por tanto fallar en la reparación de dichas lesiones genéticas provocaría una variedad de desórdenes genéticos hereditarios y envejecimiento en humanos. Por tanto como cualquier otro órgano, la piel sufre las consecuencias de estos desajustes y sus efectos se pueden volver evidentes a simple vista, como resultado de esto: ?la piel pierde funcionalidad, sus propiedades resultan dañadas y su apariencia global empeora, pareciendo más envejecida?. Reforzar los mecanismos endógenos para minimizar los errores genéticos implicaría que las células tuvieran una prolongada calidad de vida, pareciendo más jóvenes. Exposición diaria a elementos dañinos para el ADN: Agentes oxidativos de origen externo o interno (metabolismo celular). Exposición a fuentes de calor o radiación. Rayos UV. Contaminación (hidrocarburos aromáticos policíclicos): Aceite, carbón, humo de cigarrillos y automóviles. Dieta (escasez de vitamina B12, B6, C, E, ácido fólico, niacina, hierro o zinc). Error en el proceso de replicación del ADN. Diversos agentes y factores habituales causan errores en el SDN que alteran el funcionamiento celular normal, traduciéndose en un envejecimiento y deterioro evidente de la piel si estos persisten. Eliminar errores en el ADN y alargar la vida: Debido a que el ADN tiene un papel activo y crítico en la división celular, el control de su reparación está ligado a la regulación del ciclo celular, por tanto es necesario verificar que el ADN de una célula esté intacto antes de permitir su replicación y división celular, que propagaría cualquier error existente. El ciclo celular necesita ser detenido para que los mecanismos de reparación tengan tiempo de corregir los daños y para que las estructuras temporales necesarias para dicha reparación no causen errores adicionales, además están implicados en la activación de procesos de reparación del ADN y programas de transcripción. Estos factores de transcripción son proteínas esenciales y están presentes en todos los organismos, que se unen a secuencias específicas del ADN, regulando el proceso de transcripción que transforma el ADN en ARN, seguido por la formación de la correspondiente proteína (nueva estructura). Existe una subfamilia en mamíferos denominada FOXO, que regulan los genes implicados en la reparación del ADN, ayudando a corregir los errores. En humanos se denomina FOXO-3a, es un elemento vital para el control de este daño genético. FOXO-3a, Factor clave en la longevidad celular: La capacidad de un organismo de reparar el daño ocasionado al ADN está correlacionada con su propia longevidad. La forma activa de FOXO-3a regula el nivel de oxidación celular mediante el aumento de los niveles de conocidos agentes antioxidantes (superóxido dismutasa de manganeso y catalasa), lleva a un estado de reposo celular (detención en fases celulares no replicativas de ADN) donde los posibles errores genéticos se pueden corregir, induce la expresión de genes involucrados en la reparación del daño en el ADN y activa la apoptosis (muerte celular), cuando las señales de supervivencia no están presentes. Estos hechos proporcionan pruebas de un potencial papel clave de FOXO-3a en un envejecimiento humano saludable.
Actividad de FOXO y longevidad: En humanos, la relación entre un aumento de actividad de FOXO-3a y longevidad fue clara después de que estudios independientes realizados en poblaciones étnicas distintas encontraran que este factor estaba implicado en un envejecimiento sano. Ya que la longevidad es un rasgo de todas las células, envejecer de forma sana se extendería también a las células de la piel. En realidad una regulación a la baja de este factor mostró acelerar la senescencia celular en fibroblastos dérmicos humanos, induciendo fenotipos senescentes y un incremento de especies oxidativas dentro de las células, demostrando su implicación directa en el proceso de envejecimiento cutáneo. FOXO-3a sería como un regulador global que determina el destino de la célula cuando se detecta el daño. En función de la severidad de las lesiones, limita la proliferación celular forzando un estado de reposo para reparar los errores o induce la apoptosis. Dicha actividad protege a las células del daño inducido por la exposición UV, contaminantes, estrés oxidativo y errores de la replicación de ADN, entre otro factores, que dan lugar a distorsiones en el funcionamiento celular y efectos visibles del envejecimiento cutáneo. FOXO-3a es un factor de transcripción que regula la respuesta al daño genético, estimulando su reparación natural y retrasando los signos del envejecimiento cutáneo.
Acción Terapéutica: Juvefoxo nace como un ingrediente innovador ideal para rejuvenecer las células y protegerlas de los efectos genotóxicos de agentes dañinos internos y externos, estimulando los mecanismos naturales de FOXO-3a para evitar que los errores en el ADN persistan.
Propiedades:Eficacia in vitro: Activación de los elementos de respuesta a FOXO-3a: Se analiza la eficacia en la activación de los elementos de respuesta a FOXO-3ª, debido a Juvefoxo usando una línea epitelial humana. Discusión: Juvefoxo probó no sólo aumentar notablemente la actividad de los mismos elementos de respuesta a FOXO-3a, además demostró proteger las células cutáneas de la genotoxicidad inducida por agentes externos como los rayos UV y los contaminantes. Este nuevo péptido mostró reducir de forma significativa la senescencia celular in vitro, que se traduce en un rejuvenecimiento de las células. Adicionalmente, el hexapéptido tuvo un efecto apreciable en un panel de voluntarios a los que disminuyó la cantidad de daño genético inducido por exposición UV. Los resultados in vitro mostraron que este péptido incrementó la actividad de los elementos de respuesta a FOXO-3a humano hasta 1.9 veces respecto al control. Conclusión: Juvefoxo fue capaz de imitar la actividad de FOXO-3a. Activación de las rutas de reparación del ADN: Se analiza la eficacia de Juvefoxo como inductor de la reparación del ADN a través de las rutas de reparación de FOXO-3a mediante un ensayo de reactivación de la célula hospedadora en queratinocitos epidérmicos humanos primarios de adulto. (HEKa). Discusión: Tal y como confirmaron los valores obtenidos, el hexapéptido aumentó la reparación del ADN hasta 2.7 veces en HEKa, comparado con células sin tratar. Conclusión: Juvefoxo activó las rutas naturales de reparación del ADN, ofreciendo un efecto estadísticamente significativo. Test de fotoprotección: Para determinar el efecto fotoprotector de Juvefoxo en presencia de una dosis citotóxica de luz solar simulada en fibroblastos dérmicos humanos (HDFa). Discusión: El péptido mostró un notable efecto protector incrementando la viabilidad celular de HDFa expuestos a irradiación hasta un 35.1% versus células no tratadas. Conclusión: Juvefoxo ofreció un efecto fotoprotector estadísticamente significativo. Efecto fotoprotector del ADN frente a benzopireno fotoactivado: Demostrar el efecto protector de Juvefoxo en fibroblastos, queratinocitos y melanocitos humanos normales frente a benzopireno fotoactivado, reconocido por causar daño al ADN. Discusión: las células tratadas con benzopireno fotoactivado irradiadas sufrieron un efecto genotóxico estadísticamente significativo, que la presencia del péptido hizo disminuir un 84.3% versus solo benzopireno fotoactivado.
Conclusión: Juvefoxo ofreció un efecto estadísticamente significativo protegiendo los fibroblastos frente al daño genético inducido por benzopireno fotoactivado. Los queratinocitos quedaron protegidos de la genotoxicidad de benzopireno debido a este péptido. Juvefoxo además protegió altamente los melanocitos del daño inducido al ADN. Juvefoxo protegió de los efectos genotóxicos inducidos por contaminantes en fibroblastos, queratinocitos y melanocitos, disminuyendo altamente el daño al ADN. Revirtiendo la senescencia celular: Evaluar la eficacia de Juvefoxo en la reducción del número de HDFa primarios senescentes (donante de 55 años) midiendo la actividad de la α-galactosidasa asociada a la senescencia, que es un biomarcador de envejecimiento celular. Discusión: El ingrediente activo tuvo un efecto estadísticamente significativo al reducir el número de células senescentes en un 64.5% comparado con las mismas células no tratadas. Además indujo un cambio positivo en la morfología y el número de células senescentes acercándose a los HDFa más jóvenes. Conclusión: Juvefoxo disminuyó el número de fibroblastos senescentes, rejuveneciendo las células alrededor de 11 años. Recuperó visiblemente la morfología de células más jóvenes. Eficacia in vivo: Determinar eficacia de Juvefoxo en la preparación del daño genético inducido por radiación UV en núcleos celulares epidérmicos humanos, concretamente CPD (Dímero Pirimidina Ciclobutano) ?subproducto del fotodaño al ADN- escogiéndose un panel de 21 voluntarios entre 25-45 años con piel sana y fototipo II. Se determinaron 4 áreas de estudio, 2 zonas en cada antebrazo del voluntario. Dos de esas zonas se usaron como controles (control para no irradiado no tratado y para irradiado no tratado) mientras las otras 2 se irradiaron y se trataron. Un tratamiento consistió en aplicar una crema placebo y el otro, en aplicar una crema activa que contenía 2% de Juvefoxo solución, después de irradiar. Se estableció la dosis de eritema mínima (MED) para cada voluntario irradiando dosis crecientes de luz UV. Tres áreas se irradiaron con 2 MED y después se aplicó la crema placebo a una zona, la crema activa a otra y ningún producto en la tercera. Se recogieron biopsias para analizar la presencia de CPD mediante un análisis inmunohistoquímico (núcleos de color rojo). Se tomaron de todas la zonas a las 6 horas (a, b, c, d) y sólo de las zonas irradiadas (b, c, d) después de 24 horas. El daño genético inducido por UV expresado como CPD en los núcleos celulares epidérmicos fue reducido por el péptido después de 6 horas y 24 horas. Versus el placebo, la crema activa ofreció 2 a 4.3 veces más efecto reparador, respectivamente. Juvefoxo tuvo un efecto relevante en la reparación de alteraciones genéticas inducidas por UV:
La piel expuesta a irradiación demostró sufrir múltiples alteraciones en el ADN comparando con la piel no irradiada. Por otra parte, la aplicación del péptido redujo los CPD no sólo respecto a la piel irradiada no tratada después de 6 y 24 horas, sino también versus el efecto del placebo en piel irradiada. Juvefoxo disminuyó la cantidad de CPD inducidos por radiación UV, siendo mucho mas eficaz que el placebo. Propiedades cosméticas de Juvefoxo: Hexapéptido que actúa como FOXO-3a, preservando la integridad genómica y ayudando a las células a permanecer más jóvenes por más tiempo. Activa los elementos de respuesta a FOXO-3a alrededor de 1.7 veces y 1.9 veces a diferentes concentraciones, siendo capaz de imitar la función de este importante factor de transcripción cuando existe daño genético. Estimula las rutas de reparación de ADN alrededor de 2.7 veces a 0.5 mg/ml, evitando que los errores en el ADN persistan. Ofrece un elevado beneficio fotoprotector, incrementando la viabilidad celular un 20% y 35% a diferentes concentraciones. Proporciona una protección frente a contaminantes, disminuyendo el daño al ADN un 84%, 99% y 91% en fibroblastos, y melanocitos respectivamente. Disminuye el número de células senescentes un 64.5%, lo que implica un rejuvenecimiento celular de unos 11 años. Aplicaciones cosméticas: Juvefoxo está especialmente diseñado para potenciar los mecanismos que reducen el daño al ADN producidos por distintos factores a lo largo de los años (exposición UV, radiación, estrés, replicación de ADN, dieta, etc.) protegiendo la integridad genómica. Como resultado, es ideal para incorporar en formulaciones faciales y corporales para enfatizar la protección celular (frente a contaminantes y medio ambiente), fotoprotección (cuidado solar), resistencia al estrés, longevidad y vitalidad celular (rejuvenecimiento), así como en tratamientos antienvejecimiento y productos principalmente creados para deportes exteriores (protección ambiental). En realidad se puede añadir a cualquier formulación cutánea para reducir de forma adicional el daño genético existente.
Posología: Se recomienda una dosis del 2% de Juvefoxo. Aplicar 2 veces al día o según indicación médica.