Descripción: La centella asiática es una planta que las medicinas tradicionales asiáticas y africanas llevan utilizando con fines terapéuticos desde hace más de 3.000 años, por sus propiedades cicatrizantes, analgésicas, antimicrobianas, digestivas, antivirales, etc. Sus principales constituyentes químicos son: triterpenos pentacíclicos y sus geninas: ácidos asiático y madecásico y heterósidos (asiaticósido, madecasósido y terminolósido).
Acción Terapéutica:Acción venotónica: Contribuye a la mejora de la microcirculación, reduciendo significativamente la celulitis. Recetario Magistral de Farmacias Ahumada actualmente cuenta con 2 tipos de centella asiática: Centella asiática titulada: concentración asiaticósidos 40%. Rango de uso: 0.5%-2%. Extracto de centella asiática: concentración asiaticósidos 20%. Rango de uso: 1%-10%.
Propiedades:Acciones farmacológicas: Las acciones más estudiadas de la CA son la cicatrizante, regeneradora, reparadora y renovadora sobre la piel y las mucosas, así como la venotónica. Según la monografía de la OMS, la actividad farmacológica de la CA puede deberse a la acción sinérgica de varios de sus componentes, especialmente los compuestos triterpénicos. Cada uno de ellos, por separado, han mostrado (in vitro) estimular la activación fibroblástica y la producción de colágeno I y III, clave en la curación de heridas, por su consecuente efecto reepitelizante. Acción cicatrizante: El asiaticósido ha mostrado producir una aceleración en la curación posquirúrgica de heridas superficiales y úlceras y, en general, de los procesos cicatriciales. In vitro, activa las células de Malpighi en epidermis porcina. La aplicación tópica de asiaticósido promovió la cicatrización de heridas en ratas y aumentó significativamente la resistencia a la tracción en la piel recién formada. También se han demostrado su capacidad inmunomoduladora e inhibidora del proceso inflamatorio, que puede provocar hipertrofia en cicatrices. Extractos de CA y, en particular, sus principales triterpenos y ésteres glucosídicos, mostraron su eficacia en el tratamiento de cicatrices hipertróficas y queloides y disminuyeron la fibrosis en las heridas. El mecanismo de acción parece ser doble. Por un lado, aumentan la síntesis de colágeno y de ácidos mucopolisacarídicos y, por otro, inhiben la fase inflamatoria de cicatrices hipertróficas y queloides. Se ha propuesto, además, que el asiaticósido interfiere en la formación de cicatrices por el aumento de la actividad de miofibroblastos y colágeno inmaduro.
Posología: Sugerencias de formulaciones magistrales: Rp 1: Crema reductora: Extracto de centella asiática 5%; rosa mosqueta 1%; mentol 0.3%; alcanfor 0.3%; crema base c.s.p 500 g. Rp 2: Crema anticelulítica: Extracto de centella asiática 8%; vitamina C 1%; vitamina E 0.6%; ácido glicólico 3%; crema base c.s.p 500 g. Rp 3: Crema reafirmante: Centella asiática 1%; elastina 5%; extracto hedera hélix 2.5%; cafeína 4%; crema base c.s.p 500 g. Rp 4: Crema liporeductora: Centella asiática 0.5%; extracto cola de caballo 2%; elastina 3%; árnica 2%; crema base 500 g.