Indicaciones:Aplicaciones: Cicatrizante; regenerador de tejidos; psoriasis; antiinflamatorio.
Propiedades:Comedogenicidad: Los test de comedogenicidad efectuados en las escuelas de medicina de Texas y Houston al aceite de EMU en concentraciones desde el 25% al 100% dieron negativo, considerando mediciones histológicas y de observación. Con esto podemos concluir que es posible utilizar aceite de emú en formulaciones magistrales tanto faciales como corporales. Su alto porcentaje de ácido oleico es el que aporta el efecto antiinflamatorio. Las propiedades cosméticas y humectantes del aceite de emú, fueron estudiados en un estudio de doble ciego. Se comparó con el aceite mineral, encontrándose el aceite de emú cosméticamente más aceptable y con mejores propiedades de penetración/permeabilidad; además, posee mejores propiedades humectantes y muy baja incidencia comedogénica. La composición de ácidos grasos fue estudiada por cromatografía de gases y se encontraron altas concentraciones de ácidos grasos no polares monoinsaturados, lo que explica la facilidad de penetrar la barrera del estrato córneo.
Posología:Ejemplo de prescripción: Rp 1./ aceite de emú 6%; pasta lassar c.s.p. 30 gr. Rp 2./ aceite de emú 6%; óxido de zinc 10%; cold cream c.s.p. 30 gr. Rp3./ aceite de emú 8%; novobase II c.s.p. 60 gr.
Observaciones:Introducción: El emú es un ave originaria de Australia. Sus dimensiones son de 1.80 m de altura y aproximadamente 60 kg de peso en edad adulta. Hay varios países, entre ellos Canadá, Estados Unidos y Chile, en los cuales se está desarrollando la cría de estas aves para obtener productos como carne, cuero, aceite. Los aborígenes australianos han usado desde hace muchos siglos el aceite de emú para aliviar dolores, curar heridas, proteger y humectar su piel. Por sus propiedades regeneradoras, superiores a la de la rosa mosqueta, se han desarrollado en Estados Unidos líneas completas de productos que van desde el aceite puro, hasta cremas y geles.